¿Verdad que piensas que tu radiador está en el peor sitio posible de la habitación? No estás solo, ocurre a menudo que no hay fórmula para distribuir la decoración para disimularlo. Pero no te preocupes, aquí te dejamos algunas ideas para que ese dichoso radiador pase algo más desapercibido.
Hoy te contamos cómo integrarlos en el decorado pero sobre todo, cómo hacerlo de una forma segura y cozy.
En Artecortina nos encanta aportar nuestro toque diferencial a cada hogar. Quizás unas buenas cortinas a medida de nuestra tienda en Málaga sean ideales para acompañar al elemento que ocultará tu sistema de calefacción.
Para entrar en calor y nunca mejor dicho, empecemos por el cubrerradiador. Un mueble a medida que para muchos es la solución más tradicional y sencilla. Pero… ¡ojo! Que cubrir un radiador con un mueble, no es tan buena idea como parece.
¿Por qué? Porque el mueble absorberá el calor impidiendo que se extienda por toda la habitación, el salón, el baño o el recibidor. Esto hará que el radiador reduzca su rendimiento calórico y pierda parte de su eficiencia.
Entonces, ¿es posible hacer uso de cubrerradiadores? Sí, compartimos contigo las mejores recomendaciones:
- Cubrerradiadores con rejillas de madera o de metal para que el flujo de calor sea constante. Podrás encontrar colores muy variados aunque los más demandados y prácticos, suelen ser el negro y el blanco.
- Cubrerradiadores con rejillas de aluminio. Otra buena alternativa. Dejan pasar muy bien el calor y destacan por su ligereza visual.
- Cubrerradiadores con rejillas de mimbre. Para una decoración más cálida y natural, ya sabrás que éstos son ideales.
- Cubrerradiadores con franjas horizontales. Te darán amplitud visual con el efecto de las franjas en paralelo y la visión del conjunto hará que te sientas en un ambiente armónico.
Por aquí, otros elementos que también te servirán:
- Baldas por encima del radiador tipo cómoda (a distancia de seguridad). Puede ser todo un acierto por su doble función. Además de disimular su visión, podrás utilizarlo como un espacio extra de almacenamiento o decoración. Apoyalibros o conjuntos de pequeñas plantas, ¡prueba!
- Bancos o butacas de diseño para tapar radiadores pequeños o mesas estrechas para radiadores altos. Depende del radiador que tengas, ambas opciones son buenas.
- Biombos y/o separadores de espacios. Útiles para apartarlos un poco durante las épocas de primavera y verano.
- Lamas de madera. Simples pero efectivas. Perfectas para que cubras la parte frontal de tu radiador.
- Una buena mano de pintura, muchas veces, es lo único que se necesita. Sólo tendrás que pintar la pared y el radiador del mismo color. Serán la fusión perfecta. Y si es de un color oscuro, ¡mucho mejor!
Como truco extra: añade cuadros, fotografías…y en definitiva, elementos decorativos que hagan que el peso de la vista al entrar en la estancia no sea el radiador.
Y por supuesto, si no te convence alguno de estos elementos, recuerda hacer uso de los puntos estratégicos: tras la mesita de noche, detrás de la puerta o encajado en una hornacina hecha por obra o posteriormente en la propia pared.
En definitiva, existen un sinfín de soluciones para disimular los radiadores.
En Artecortina estamos encantados de asesorarte en lo que necesites. No dudes en preguntarnos por las telas de nuestra tienda en Málaga si crees que pueden servirte.